viernes, 24 de julio de 2009

Anzuelo

Es que no se como retroceder,
te lo digo con toda mi sinceridad,
quiero irme pero no quiero volver,
no quiero regresar atrás, a esos días de soledad.

Quiero que sepas que ya no hay más,
no queda amor en mi corazón,
se fue como una estrella fugaz,
ahora soy un barco sin timón.

El miedo se hace presente,
el dolor es moneda corriente,
la atracción brilla por su ausencia,
el rencor es un puñal a la conciencia.

Nos separa una distancia enorme,
ya no somos los mismos,
vamos por un camino deforme,
camino que conduce a ningún destino.

Nos falta abrigo y hogar,
nos falta cariño y amistad,
nos faltan alas para volar,
nos sobra la maldad,
nos sobra la ingenuidad.

Nos atrapamos el uno al otro,
ahora no sabemos como escapar,
ya ni siquiera reconocemos nuestros rostros,
somos como dos peces fuera del mar,
la falta de aire se hace notar,
la respiramos toda entre nosotros,
y ahora se nos acabó la esperanza de poder continuar.

Estamos muertos en la arena,
y el anzuelo de nuestro amor fue la condena.

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